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¿Qué es lo más importante para ti a la hora de elegir tu nueva vivienda? Muchas veces pensamos en la distribución de la vivienda, la ubicación o las calidades. Pero hay una cosa que puede ser muy importante y que, aunque es básica, en ocasiones, no se le da la importancia que debemos.
¿Sabes ya de qué estamos hablando? Efectivamente, hablamos de la orientación de la vivienda, un hecho que afecta al ahorro energético e incluso puede influir en la decoración, ya que según hacia donde esté orientada la vivienda la iluminación o disposición del mobiliario podrá variar.
¿Cómo sé cuál es la orientación que mejor se adapta a mí?
No hay una orientación que esté considerada como la mejor, la decisión podrá depender del clima de la zona donde se encuentre la vivienda, las necesidades o las preferencias personales del propietario. Lo que sí te podemos decir son los beneficios o diferencias entre unas y otras.
Orientación norte:
Esta opción no suele ser la preferida a la hora de elegir, aunque ciertamente tiene sus ventajas. Lo más importante es que las viviendas con orientación norte tienen una iluminación homogénea a lo largo del día, sea mucha o poca la luz impactará siempre de la misma forma, y será de forma indirecta excepto en las mañanas y las tardes de verano.
Si tu vivienda está ubicada en una zona de mucho calor esta podría ser una opción ganadora.
Orientación sur:
Al contrario de la orientación norte, si tu vivienda está ubicada en un lugar frío esta será una buena opción. Si estás en un lugar frío, o si te gusta mucho el sol, las viviendas con orientación sur están expuestas al sol todo el día prácticamente todo el año.
Las viviendas con orientación sur son, como es de esperar, muy luminosas y cálidas.
Orientación este:
¿Una vivienda con orientación este? Entonces tendrás luz solar directa por las mañanas. Si vives en una zona de calor es una buena opción, ya que conseguirás mucha luminosidad en la primera mitad del día donde la temperatura no suele ser tan elevada y más sombra por la tarde cuando el calor es más fuerte.
Una buena alternativa si te gusta el sol, pero la orientación sur es demasiado para tu gusto.
Orientación oeste:
La orientación oeste suele ser la gran olvidada, pero como el resto tiene aspectos muy positivos. En este caso la incidencia del sol, como es obvio, ocurre al contrario que en la orientación este, el sol incide desde mediodía hasta el ocaso. Por tanto, sería una buena elección si tu vivienda está en un lugar de clima frío, pero poco recomendable si se sitúa en una zona de mucho calor.
Una vez analizadas todas las orientaciones, ¿cuál crees que es la que más te gusta?